jueves, 18 de agosto de 2016

Brasil y Alemania, una inédita final

Neymar y Alemania, campeón del mundo en casa del menino, se encontrarán el sábado en el Maracaná en la final por el oro olímpico de Río-2016, una suerte de revancha para Brasil después del vergonzoso 7-1 en el Mundial-2014 cuando soñaba el hexacampeonato. La seleçao y la "Mannschaft" disputarán una final inédita en Juegos Olímpicos, luego de imponerse en las semifinales: la "canarinha" no tuvo piedad de Honduras al golearlo 6-0 y los germanos con un 2-0 detuvieron el vuelo de las "Águilas Verdes" nigerianas.

Un recuerdo que no se supera. "El 7-1 fue increíble, en la carrera, en la vida, y el sábado no le vamos a ganar 7-1 a Brasil", dijo el defensor alemán Matthias Ginter, que integró el plantel de Joachim Löw, pero sin disputar un solo minuto en el Mundial brasileño. El carnaval carioca inició muy temprano con la pintada de cara de Neymar y compañía a Honduras, que había llegado a las semifinales superando muros que se veían infranqueables, como Argentina en la primera fase, y Corea del Sur, en los cuartos de final.

Neymar, a los 15 segundos y 90 -penal- minutos, Gabriel Jesús (26 y 35), Marquinhos (51) y Luan (79) marcaron los goles de la seleçao, triple medallista de plata en Londres-2012, Seúl-1988 y Los Ángeles-1984. "El 1-0 nos ayudó mucho porque pensábamos que iba a ser un partido difícil, ese gol nos dio tranquilidad para el resto del juego, fue espectacular y llegamos a la recta final muy fuertes", dijo el técnico de Brasil, Rogério Micale, en rueda de prensa. Explosión de emoción en el Maracaná y récord para el "menino" como el gol más rápido en la historia del fútbol olímpico, superando los 30 segundos del hondureño Alberth Elis, en Río-2016 ante Portugal, y del mexicano Oribe Peralta, en la final de Londres-2012.

Certeza germana. Alemania, por su parte, no pasó apuros para derrotar a Nigeria con tantos de Lukas Klostermann, a los 9 minutos, y Nils Petersen, a los 89. La torcida brasileña, volcada en Sao Paulo desde el inicio a alentar a los africanos, le gritó a los teutones "¡O, Alemanha, pode esperar, a sua hora vai chegar!", una especie de advertencia de lo que podría ocurrir en el templo sagrado del país del "jogo bonito".

Neymar, que ganó la plata en Londres-2012, "es un monstruo", aseguró Micale al calificar la actuación del astro ante la 'H'. "Tiene un don enorme, es un monstruo. Es el exponente de todo esto y está ayudando a que se eleve el nivel del fútbol brasileño", sugirió el DT, que se había declarado "neymardependiente" antes de los Juegos, algo que no le gustó a Tité, el flamante reemplazo del desprestigiado Dunga. Honduras y Nigeria, por su parte, lucharán por la medalla de bronce el sábado en Belo Horizonte.

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