La selección alemana desembarcó en la ciudad de Salvador (Bahía), ocho días antes de su debut en el Mundial de Brasil ante Portugal, el 16 de junio en el estadio Arena Fonte Nova.
Tras aterrizar en la capital de Bahía, los alemanes fletaron un avión hasta Porto Seguro; realizaron un recorrido de unos 30 minutos en autobús, y tomaron una balsa hasta llegar finalmente a su “cuartel general”, situado en la villa de Santo André, en el sur de Bahía.
El complejo donde se instalará el conjunto europeo, conocido como Campo Bahía, fue construido con recursos de la Federación Alemana de Fútbol y con el apoyo financiero de patrocinadores para hospedar a la selección.
Campo Bahía, que cuenta con un área aproximada de 15.000 kilómetros, será utilizado posteriormente como condominio de lujo. Los jugadores fueron recibidos por un centenar de personas con banderas de Brasil y Alemania, e incluso por un batucada que amenizó su llegada tras el largo viaje. Además de Portugal, la selección alemana, que se encuentra en el Grupo G, se medirá a Ghana el 21 de junio, en Fortaleza, y a Estados Unidos el 26, en Recife, en la fase de grupos.
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